¿Y el Nativitas?

La llegada de la Navidad, representa la época más esperada y más feliz del año. Muchos festejos y tradiciones rodean dicha fecha, que ciertamente, contribuyen en conjunto a darle tanta belleza a la navidad. Pero, ¿realmente estamos haciendo un festejo espiritual de la navidad, o es simple paganismo?.

Tal como muchas otras palabras del español, tenemos que Navidad remonta su origen etimológico a la expresión latína: "Nativitas" cuyo significado es: "Nacimiento". Y, sin querer ahondar mucho en detalles (ajenos al interés de este post), se ha tomado al 25 de diciembre como fecha para conmemorar ese hecho.
La importancia de la acotación anterior, es para iniciar las reflexiones que quiero aportar, cuidando que no se vean extralimitadas sino estrictamente ajustadas a lo que el concepto Navidad realmente representa.
Sucede que lo que pensamos es la celebración de la navidad, no es otra cosa que una sumatoria de prácticas tradicionales, que en nada representan a la navidad.
La navidad debe constituir, tomando como fecha la aceptada universalmente en el 25 de diciembre, un día para conmemorar el nacimiento de Jesús, recordando lo ocurrido ese día, y reflexionando sobre la inmensa trascendencia del mismo tanto para nuestras vidas como para la humanidad. ¿Y realmente hacemos eso?.

Por un lado, tenemos la sustitución del personaje de la navidad, en la persona del conocido San Nicolás. Es triste, pero verídico, porque no veo a ningún niño pensando en la navidad en términos de la persona de Jesús, sino en términos de la figura ficticia de San Nicolás. Es decir, se convierte también a la navidad en un hecho ficticio, por cuanto su personaje sustituto es ficticio, y ya por allí vamos por mal camino, porque la navidad es desfigurada en una fiesta pagana. El Jesús del pesebre, es sustituído por el San Nicolás que entra por la chimenea a traer su regalo. No es importante el regalo de salvación de Jesús, sino el regalo que en su laptop ha previsto San Nicolás para el niño. ¡Diosssssssss!, santa herejía.
¿Por qué pagana?. Veo muchos compañeros de trabajo comprando cerveza y ron para beberlos "el día de la navidad" en familia. ¿acaso el uso de bebidas alcohólicas tendrá alguna referencia bíblica, aunque sea mínima, en la celebración de navidad?. Quiero que hagamos ejercicio de visualización sobre dicha pregunta, en el párrafo que continúa.
Efectivamente, ninguno de los personajes tiene ninguna vinculación con el alcohol. Los ángeles de la anunciación ni estaban ebrios, ni sugirieron esa conducta como la mejor para ir a recibir al niño del pesebre. Los pastores, ninguno se presentó ebrio. ¿Será José que se embriagó de la emoción?, pues tampoco, porque José fue un hombre devoto y de correcto proceder. Entonces, ¿no es una paganización el festejo navideño con alcohol?.

El árbol de navidad. Bellísima expresión del tiempo navideño, pero no es esa la Navidad. Muchas imágenes de arbolitos navideños adornan tarjetas y blogs,para significar esa fecha. ¿Se hace significativo en nacimiento de Jesús en la incorporación del arbolito de navidad?. El niño no piensa en Jesús, piensa en el famosamente tradicional, arbolito de navidad, primeramente por su belleza, y luego, por el hecho de que alrededor del mismo estará su infaltable regalo.

Veo como cada familia y cada empresa, ha convertido la decoración de su arbolito en una competencia social. Y esa razón ha elevado los precios de los adornos del arbolito, que puede representar algunos ceros a la derecha del dígito del cheque de pago. Eso es muy bonito, pero no refleja realmente el mensaje original del nativitas. Es la incorporación del concepto capitalista del consumismo, tan stresante en esa época. Un fenómeno acompañado de la infaltable publicidad consumista apoyada en la siempre vendedora imagen femenina, desfigurando la imagen materna femenina del nativitas.
Entonces, viene la angustia de los padres, producto del fenómeno ideológico capitalista, que introduce como "valor social de la navidad" el regalo de navidad. Haciendo uso del poderoso aparato de la publicidad, y apoyado en la imagen de San Nicolas, el empresario capitalista genera la necesidad del regalo del 25. Angustia y deudas en los padres por complacer los gustos de sus hijos, algunos de los cuales incluso, corresponden a esa generosidad paterna, con una criticable ingratitud, no valorando los sacrificios del padre para adquirir dicho regalo. Aclaro, ya es tradicional la entrega de regalos el 25, pero ¿qué tiene que ver con el festejo del original nativitas?. ¿Acaso comete pecado el padre que por desempleo o enfermedad no puede complacer a su hijo con un regalo?, como lo he escuchado, y por eso la catalogación de paganización de la navidad. ¿No es acaso más importante la reflexión de que ese día la humanidad recibió el regalo valioso del Salvador del mundo?.
Nunca he visto, en mis 50 navidades vividas, alguna valla publicitaria con Jesús como tema de la navidad. ¿Saben por qué?. Es que la valla publicitaria de Jesús no vende. Por eso el capitalista la sustituye por el personaje de San Nicolás. Y lo más triste, la bondad salvadora del Señor Jesús, es sustituída por la bondad generosa del personaje ficticio de San Nicolás, ¡abráse visto peor desfiguración de la Persona de Jesús!.

De lo antes dicho, aún hay otras derivaciones para reflexión. Los niños no piensan en el Jesús Salvador que nació en esa fecha, sino en que su regalo es más feo o más bonito que el de su vecino o el de su hermanito. Es como que si San Nicolás no hubiera cumplido bien su cometido.
Es tal la transfiguración histórica de la navidad, que aún en iglesias protestantes se ha incluído la imagen y del mensaje capitalista de San Nicolás, en dramas y poesías que repletan los actos que celebran ese día, incluso con el consentimiento del Pastor y otros directivos eclesiásticos que no ven dañina tal paganización.
Siendo justos, ningún personaje histórico había sido tan desfigurado como Jesús. Porque cuánta solemnidad se ve en los natalicios de Simón Bolívar o George Washington, o cualquiera otro. Incluso, se ve lesivo al buen sentimiento patriota, el consumir licor esos días tan solemnes. ¿Es menos solemne el natalicio de Jesús?. ¿Tiene menos merecimiento que Bolívar o Washington?.

Por otra parte, quiero hacer un apartado para reflexionar en los mensajes de navidad. Es muy halagador los mensajes de texto que recibo en mi celular, o los correos electrónicos, pero, veo el mismo problema: total ausencia del nativitas. Hay cualquier cantidad de mensajes, por cierto muy bonitos, pero ninguno habla del nacimiento de Jesús. Eso me recuerda los decretos que sacan algunos gobernantes, donde impiden el uso de la imagen o pensamientos de políticos a quienes les tienen temor por su popularidad. ¡Caramba!, es como si se hubiera emitido un decreto prohibiendo el uso del nombre de Jesús en la navidad, y les digo, de Satanás nada me asombra, y su "mano peluda" está metida tras esa paganización.

Navidad es tiempo de "cultura navideña", es decir, donde prevalecen los valores esenciales de la navidad, como son: alegría, paz, reconciliación, entusiasmo, optimismo. Dicha cultura ha obviado lo más importante: el nativitas, y todas las iglesias, católicas y protestantes, tienen su cuota de responsabilidad, por su silencio, por su apatía, por su complacencia, por su "santa herejía". Al ver todos los aderezos de la llamada cultura navideña, me pregunto: ¿y el nativitas?.