¿Gentuza para Dios?.

La vida cristiana "debe" estar caracterizada por el matizamiento de los principios cristianos sobre nuestros pensamientos, palabras y acciones. No puede ser de otra forma, sino de cristianismo pasaríamos a estar hablando de un simple humanismo, que contempla la realidad desde la óptica cristiana, pero sin asumir responsabilidades ante Dios. De manera que el cómo nos relacionamos con los demás es un buen indicador de esa relación con Dios, y pregunto: ¿son para tí los demás, unas almas amadas de Dios o simple y vulgar gentuza?. ¡Extraña pregunta!, pero ahora descubre el por qué en las líneas siguientes. Conversaba con una "líder" de la iglesia cristiana, que es maestra de niños por años. Al referirse a unos vecinos comentó al marido lo siguiente: ¡No te relaciones con esa gentuza!. Me impresionó sobremanera esa forma de ver a los demás, en una persona que se identifica como cristiana, y además con la magna responsabilidad de enseñar a los niños. En mi país (Venezuela), utilizan el término gentuza para referirse despectivamente a las personas, como personas pobres, o de mal vivir, en fin, personas a quienes las ven carentes de algún valor; y es muy frecuente su empleo por las personas adineradas para referirse a las personas de pocos recursos económicos.
Retomando la narración de la conversación con la líder, sencillamente, le recriminé su manera de hablar, y ella lo justificó en la ignorancia y miserable vivir de las personas a las que se refería. Pregunto: ¿Esa gentuza no es acaso una persona digna ante los ojos de Dios?, y paso reflexionar que para esa líder, esa gentuza "ni siquiera merece que le den el mensaje de salvación", haciéndome recordar un predicador que conocí en un hotel con una actitud totalmente distinta.
El predicador al que cité en el párrafo anterior, lo recuerdo porque tomó especial interés en un indigente que se la pasaba en los alrededores del hotel, pidiendo limosna y comida. Su presencia personal, además de expeler mal olor de tantos días sin una ducha, era deprimente por las huellas en su rostro dejadas por el desprecio de los demás. El predicador se enteró que ese indigente fue echado a la calle por sus propios hermanos, por golpear consuetudinariamente a su madre. El final de la historia fue, que al verlo como un alma valiosa para Dios más que como un vulgar gentuza, logró que dicho indigente aceptara a Cristo como Salvador Personal. Y el predicador se fue para su país de origen, y el indigente a morar con el Señor Jesucristo, porque a los días de haberse marchado el predicador, falleció el indigente: es como si Dios hubiera enviado a ese siervo, para que rescatara a esa pobre alma, y, eso fue posible porque para el predicador ese indigente no era una gentuza. Y pregunto: ¿será que por su pecado de golpear a la mamá y vivir ebrio, ese indigente no tiene acaso el derecho de tener la oportunidad de recibir la Salvación?. E insisto: Ese indigente era, ¿Gentuza para Dios?.
Ciertamente, cuando la gente asciende de status social por logros profesionales (la líder del ejemplo es un caso de una mujer con logros profesionales), muchas cosas en su vida cambian. Es innegable que las condiciones económicas de vida, serán parte de ese cambio. Pero, ¿también la manera "cristiana" de ver la vida, puede cambiar tanto, como para ver a otros como simple gentuza?.
Este blog lo destino a comentar lo que veo en la realidad. La idea es fomentar un cambio. Otro punto es que las reflexiones puedan dar aportes en los contenidos de clases y sermones. Y lo digo, porque una "líder" cristiana que ve a sus semejantes como gentuza, además de dar muestras evidentes de que no ha experimentado el cambio espiritual que representa la vivencia diaria con el Espíritu Santo, es para peores circunstancias, un pésimo testimonio para quienes la escuchan.
Quiero aclarar que la idea de este post, es que los pastores evangélicos deben estar concientes de que se debe hacer un trabajo espiritual muy importante sobre el plantel de líderes de su iglesia, porque no creo que una líder que ve como gentuza a sus semejantes, pueda dejar algo positivo en los niños que tiene a su cargo; sería preferible tener humildes maestros con evidentes señales de huellas del Espiritu Santo en sus vidas, a maestros con alta cultura profesional pero pobre cultura cristiana, porque la cultura cristiana en nada es discriminatoria, al partir del hecho de que todos somos creación amada del mismo Dios,y por tanto altamente valiosos (por igual) a los Ojos Santos de nuestro Padre Celestial.
Para tener amor por las almas, no lo vas a lograr viéndolos como gentuzas, o indigentes, o miserables, o ......!!!!, lo vas a lograr es viéndolos como almas amadas de Dios. Para Dios: el asesino, el violador, el indigente, el magnate petrolero, la monja, el homosexual, el sacerdote, las prostitutas......, todos son para nuestro Dios igualmente valiosos, porque si ves con desprecio al recluso por violación u homicidio, ¿Cómo piensas llevarle el mensaje de Salvación?. Entiendo que quizás pienses que no lo merecen, olvidando que existen muchos predicadores en sus vidas pasadas tuvieron un mal vivir (yo ví el video de un predicador que en su vida pasada fue homosexual y ebrio, y ya regenerado se convirtió en predicador). Ante Dios, todos somos valiosos, ninguno es más alto que otro, ni más bonito que otro, ni más importante que otro: Parece evidente o hasta una "nimia afirmación" lo que acabo de escribir, pero repito: quien ve a sus semejantes como gentuzas, está olvidando el valor y significado de esta "nimia afirmación".
Espero que se haya captado la intención del mensaje, donde se procura no criticar a quienes piensan así (porque a pesar de pensar así, son valiosos para Dios), sino aportar un punto de reflexión para quienes identificándose como cristianos se expresan de esa forma, "¡totalmente impropia de un hijo renacido de Dios!". Entiendes ahora el por qué del título: ¿Gentuza para Dios?.