La oración de fe es poderosa, pero, ¿cuánta fe tienes en la oración por aquellas personas desvalidas que ni siquiera conoces?. ¿Tienes la convicción de que Dios va a obrar en casos semejantes?. ¿Oras por rutina, por simple pedir por ellos?. ¿Por qué las preguntas anteriores?. La respuesta es porque provienen de una conversación que escuché donde se debatían esos asuntos, y consideré muy pertinente publicar esas experiencias en este blog, donde pese a no tener un vasto conocimiento por no tener estudios teológicos ni en Seminarios, pues cada publicación lleva la mayor y mejor intencionalidad de dejar un mensaje que sirva de edificación, lo cual ni siquiera depende de mí sino del Espíritu Santo. De manera que me dedique a reunir varias anècdotas verìdicas relacionadas y que hoy las publico. Al grano: Una persona que oraba en un grupo atendiendo a la petición DESEMPLEADOS opinó en voz alta si realmente Dios obra en no sé cuántos desempleados por los que él oraba y ni conocía. Su argumento fue qué sentido tiene orar por personas que ni conozco, allende de tantos desempleados que hay. ¿No sería mejor orar por una lista de desempleados conocidos?. Alguien le respondió: Yo padecí el problema del desempleo por cierto tiempo, y tengo la certeza que la bendición de mi actual trabajo es la respuesta de Dios, no sólo a mis oraciones, sino a las de tantos que algún día clamaron a Dios la misericordia por los desempleados.
Este argumento lo revalidó para justificar las oraciones de tantas personas que se vieron afectadas por el tsunami de Japón, que incluso su religión oficial no es la cristiana, y sin embargo, igual por amor cristiano se justificaron las oraciones que a nivel mundial se pidieron por todo medio (radio, tv, twitter, facebook) para que la misericordia de Dios consolara y socorriera a tanta víctima desde niños a ancianos y jóvenes. ¿Es acaso coincidencia lo ocurrido a un amigo que buscaba trabajo y habìa hecho mùltiples gestiones y el empleo le llegò de la forma màs sorpresiva?, ¿saben còmo obtuvo la respuesta de su trabajo?. Saliò a hacer una llamada a un familiar, y un amigo que requerìa de un empleado administrativo lo viò en la casilla telefònica de la calle y lo abordò para preguntarle si le interesarìa integrarse a su nòmina, ¿casualidad?, ¿respuesta a oraciones?. De manera que cuando tienes frente a tí una imagen como la que inicia esta publicación, tal vez pienses que eso no va contigo, porque no conoces a ningún indigente o persona en situación parecida, pero no es así, porque aún en esas circunstancias obra Dios.... Nuestro amado Dios lo expresó muy claro, léelo en Heb.13:5 y que ves ilustrado en esta imagen:
Conocí el caso de un predicador evangélico que se hospedó en el hotel donde yo trabajé, y quien se preocupó por predicar a unos indigentes que se paraban al lado del hotel, de los cuales uno de ellos tomó la decisión de aceptar a Jesús y el predicador decía que parte de esa obra era producto de esas oraciones anónimas hacia personas desconocidas pero que necesitan del auxilio de Dios. ¿No piensas que en ese pobre indigente se cumplió la palabra que lees en Heb.13:5?. Quiero finalizar con el caso de una persona que estuvo cierto tiempo apartado de la iglesia evangélica a la cual asistía. Cuando regresó una hermana se alegró y le manifestó que había orado mucho por él, y que estaba segura que la oración de la Iglesia en favor de hermanos apartados redundó en el alegre resultado de su regreso al rebaño. Tan sencillo como que: la hermana pidió a Dios y la respuesta la obtuvo el día que lo vió nuevamente en el culto: Dios cumplió su promesa acá expresada:
Creo que las experiencias verídicas narradas dejan claro que tu oración por la humanidad "sin rostro" que sufre, que padece hambre, que duerme bajo un puente, que está secuestrado por las drogas, ... ¡no regresa vacía!. Amén. Es que las promesas de Dios son inmutables y cuando Dios te pide que ores por los desamparados no te exige que sea por tus conocidos, sino que expreses tu amor y tu fe clamando por todo el que urge la asistencia de Dios en alguna forma.
Vamos, anímate, y en este mismo momento ora por esos pobres seres humanos que andan mendigando, a quienes tú ni conoces, y que no sabes dónde están, pero sobre quienes recaerá la bendición de Dios, ... piensa que hoy mismo Dios puede darle respuesta a tu oración en quien ni te imaginas ni conoces, amén. Recuerda: Claro que debemos orar por los más necesitados y desvalidos, porque Dios te bendice en la obra que hace en ellos. Amén.
1 comentario:
Estimado Ángel Paz,
Buscamos a la persona que tomó esta fotografía, ya que la persona que aparece en la foto está desaparecida y la estamos buscando hace muchos años. Cualquier información que tengas, te agradezco me informes al siguiente correo: msegrera@gmail.com
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